miércoles, 16 de enero de 2013

Capítulo 36.


(Narra Louis) 
No aguantaba más. Había perdido toda la esperanza. No aguantaba que no se despertara. Hoy, Vero y Sele se quedaron junto a ella, así que fui con los chicos a comer y a ensayar un poco. No tenía ganas de hacer nada, pero no me quedaba otra. Ensayamos un par de canciones de "Up all Night" y cuatro o cinco canciones de "Take me Home; y a eso de las siete y media acabamos el ensayo. Harry y Niall me llevaron de nuevo al hospital.
Ya pasaron 5 semanas desde el día del accidente. Cada día lo pasaba peor, pero daba gracias a que Selena, Vero, Harry y Niall estuvieran ahí , ayudando. El caso es que me querían ayudar y pasar las noches también allí, pero se lo negaba. Prefería que ellos pudieran relajarse con las personas que querían y descansaran y yo me relajaba sabiendo que si se despertaba yo ya estaba allí.  
-Bueno bro, como todos los días, cualquier cosa nos llamas, ok?- dijo Harry cuando ya se iban a ir. 
-Sí, tranquilo.- intenté ofrecerle una de mis mejores sonrisas, pero, no estaba de humor. Selena y Vero me abrazaron y se fueron con Harry y Niall respectivamente. 
Cuando ya pasaron las últimas enfermeras para controlar la medicación, no se me ocurrió otra cosa que cantarle mientras le agarraba la mano. Necesitaba que, cuando despertara, se acordara de algo. 
-Buenas noches princesa. -Me levanté de la butaca esa y le di un beso suave, muy suave, en los labios. Me volví a sentar. Al final, me dormí. 

(Narro yo) 
No sabía que había pasado. Sólo sabía que estaba en Londres con Vero y Sele y que el señor Cowell nos iba a presentar a "nuestros tutores". Al abrir los ojos, me encontraba en una habitación blanca, muy deprimente, eso sí, con buena iluminación. Al mirar al otro lado de la habitación, me asusté. "¿Qué hacía el famoso Louis Tomlinson dormido al lado de mi cama? Esto tiene que ser un sueño -me dije." Cerré los ojos con fuerza y los volví a abrir, pero él seguía ahí. No sabía que hacer. Al inspeccionar de nuevo la habitación, me di cuenta de que era una habitación de hospital. No solo lo descubrí por las máquinas que había al lado de la cama en la que estaba y a las que estaba conectada, si no también por mi pijama. No era el mío!
 So lo se me ocurrió hacer lo que vi en una peli. Cogí una especie de palillo que había en la mesilla y me acerqué, con dificultad a causa del mareo, hasta él. Le di suave con el palillo y me escondí detrás de la butaca en la que estaba sentado. Me sentía la persona más estúpida del planeta. Como no reaccionó, me volví a tumbar. Estaba muy mareada. Quería llamar a Vero o a Selena, pero no encontraba mi móvil. Al poco de mirar bien en la mesilla, lo encontré. Llamé a Vero, pero no me contestó. "Qué raro. Ella siempre esta con el móvil...." Poco después decidí llamar a Sele, pero estaba comunicando. "Qué bien. Ni la una ni la otra coge el móvil. Vaya amigas que tengo."

Me volví a recostar sobre la cama y me quedé dormida de nuevo. 
(Narra Vero) 
Era temprano y oí como me llamaban al teléfono. Pero debía ser un sueño. Era el tono de llamada de Andy. Aún así, me levanté y miré el móvil. No era un sueño. Estaba llamando. No puede ser!! Llamé a Selena lo antes que pude. 
*Conversación telefónica*
- Sele!! Alguien me acaba de llamar desde el móvil de Andy!!
-QUÉ!!!??? Qué vas a hacer? 
- Me acompañas al hospital? O nos vemos ahí mejor? 
-Sí claro. Enseguida nos vemos. 
-Ok, bye!
-Bye. 

*Fin de la conversación telefónica*
Desperté a Harry para que me llevara al hospital. Me daba mucha pena, pero no tenía suficiente dinero para un taxi y en bus tardaría mucho. 
Estaba más o menos así... era tan lindo. 
Me acerqué con cuidado hasta él, y empecé a besarle suavemente la mejilla, luego en los labios y cuando vi que empezaba a reaccionar, me deslicé hasta su cuello.
-Um, que manera más linda de despertar.- dijo con una sonrisa muy sexy- Buenos días amor. 
-Buenos días. No me odies. Pero me tienes que llevar al hospital. 
- Qué ha pasado? 
-Es lo que intento averiguar. Alguien ha llamado desde el móvil de Andy y quiero saber si se trata de que se lo quitaron o Louis necesita algo. 
-Enseguida vamos. -Se levantó y se puso una camiseta y unos pantalones. Cogió una chaqueta, las llaves del coche y nos fuimos medio corriendo. 
Me dio la sensación de que el coche de Harry volaba, y en menos de 20 minutos ya estábamos en el hospital. 
Al llegar Sele ya estaba ahí con Niall. 
- Hola, qué rápido llegasteis!- exclamó Niall 
-Sí, había poco tráfico. Aún es demasiado temprano.- Añadió Harry. 
-Ya entrasteis a ver que pasaba?- pregunté nerviosa. 
-No, os esperábamos. -Dijo Sele. 
Enlazamos nuestros brazos y entramos a paso ligero en el hospital seguidas por los chicos que, aunque no dijeran nada, estaban nerviosos y puede que hasta asustados. 
Al llegar a la habitación, Harry petó en la puerta, pero no obtuvimos respuesta, así que entramos.
Al entrar vimos a Louis dormido y a Andy tumbada en la camilla, como todos los días desde hace 5 semanas. 
-Vale, esto ha sido una broma de mal gusto. -Se quejó Niall. 
- Despierto a Louis? A ver si sabe algo?- Preguntó Harry ya acercándose a él. 
-Como quieras, pero si te golpea no te quejes. - Rió Niall. 
Esto era demasiado. Estos tipos no son normales. El caso fue que Harry despertó con demasiada delicadeza a Louis. Él, al principio no se daba cuenta de lo que pasaba a su alrededor. 
-Qué... qué ha pasado? -preguntó  desperezándose. 
-Eso te queríamos preguntar. - dijo Niall.- Tío, llamaste a Vero desde el móvil de Andy? 
-Qué!?-Abrió los ojos como platos.- No, no, yo no hice tal cosa. Por qué iba a hacerlo?? 
-Tranquilo Lou. Sólo lo dice porque hace como una media hora, me llamaron desde el número del móvil de ella. -le expliqué. Iba a continuar explicándole pero me interrumpió. 
-Pues yo no hice nada, y nadie entró en la habitación. Me abría enterado.- cuando dijo eso Niall y Harry se echaron a reír. -Qué!?? Es cierto. 
-Sí, claro. Por eso te enteraste cuando nosotros entramos en la habitación. - Ante ese comentario de Niall todos reímos, incluso Lou un poquito. 
-Bueno, vale. No ha sido mi mejor guardia. 
-Tranquilo, no pasa nad...- no pude continuar la frase. Lo que estaba viendo era algo, impactante. 
-Amor, qué pasa?- me preguntó Harry. 
Sólo pude señalar con el dedo en dirección a la cama en la que estaba Andy tumbada...

sábado, 5 de enero de 2013

Capítulo 35.



(Narra Selena) 
Cuando Zayn nos llamó diciendo que estaban todos en el hospital me temía lo peor; y, al parecer, no iba mal encaminada. Ver a Louis así, tan triste, rompía el corazón de cualquiera. Él es una persona que siempre se está riendo y siempre feliz; y ahora, tan deprimido. Se notaba que Andy era especial para él. 
En el  momento en que llegó Simon, también entró un médico en la sala en la que estábamos. Yo estaba a puntito de perder la compostura. Era demasiado. 
-Hola.- empezó a hablar el doctor- Quién venía con la chica del traumatismo de la cabeza?- empezó a decir. 
En ese momento Louis se levantó lo más rápido que pudo. Estaba realmente mal. 
-Yo. Bueno, ellos son nuestros amigos. 
-Bueno entonces les informo.- se aclaro la garganta y comenzó a comunicarnos las noticias- A causa del traumatismo de la cabeza, hemos tenido que operar a la chica de urgencia porque tenía una hemorragia interna...- No lo pude evitar y rompí en llanto. Las demás chicas igual.- La buena noticia es que la hemorragia cesó. 
-Pero hay una mala, verdad?-comentó Simon medio interrumpiendo al doctor.
-Sí.- dijo agachando la cabeza como con lástima.- La mala es que está en coma. - Eso era la gota que colmó el vaso. No lo aguanté y me apoyé en Niall y empecé a llorar. No me podía creer que una de mis mejores amigas estuviera en coma. Louis se desplomó y se tuvo que apoyar en Liam, él y Simon fueron los que aguantaron las lágrimas.-Pero pensamos que no es muy grave. Esperamos que en poco tiempo despierte. 
-Puedo ir a verla?- preguntó Louis con la voz entrecortada mientras se sorbía los mocos. 
-Bueno. Pero de uno en uno. Síganme. 
Todos seguimos muy de cerca al médico y nos llevó a la habitación de Andy. No sé si era una broma del destino o algo para castigarnos, pero el número de su habitación era la 17. Al verlo, Louis se desplomó y lloró más. Sólo podía acercarme y abrazarle, conseguí decirle: 
- Louis, entra tú primero. Fuiste quien la trajo. 
(Narra Louis) 
Al ver ese número, me desplomé. Al parecer el destino quería que me sintiera muy culpable. Más de lo que ya me sentía. 
Intenté recomponerme para poder entrar. Respiré hondo y entré. Verla conectada a tantas máquinas y cables me rompió el corazón. Me acerqué a ella, la tomé de la mano y empecé a hablarle. Había oído que si le hablas a alguien en coma se siente querido y tiene más ganas de luchar, o algo así, sólo esperaba que fuera cierto y despertara pronto. 
Yo: Bebé, soy yo. Louis. Siento mucho lo que ha pasado. Es todo culpa mía.-Me eché a llorar, pero tenía que ser fuerte así que seguí hablándole.- No tenía que haberme parado con esa loca. Lo siento. Espero que puedas perdonarme cuando despiertes y que te pongas bien rápido. Te echo mucho de menos y te necesito conmigo. En un poco más de una semana has conseguido robarme el corazón. Te pertenece. Para siempre. Recuérdalo. Por favor. Te amo.- No sabía que más decirle. Tenía claro que la noche la iba a pasar con ella en esa habitación por si despertaba. Así que tendría más tiempo para hablarle. 
Me levanté del asiento y me dirigí a la puerta para que entrara Selena a verla. Y que después se turnaran como ellos vieran. 
Una vez fuera me acerqué a los chicos y les dije que pasaría la noche en el hospital por si despertaba o algo. 
-Pero no te vas a quedar solo. Necesitas compañía. - dijo Liam, él siempre preocupándose por los demás. 
-Tranquilo. La tengo a ella. - Intenté no desplomarme de nuevo. 
-No. Voy a hablar con el médico de antes para preguntarle si podemos quedar dos contigo o algo. -Dijo Liam. 
-Ni se te ocurra.-Se que lo decía con la mejor de las intenciones, pero sería peor- La culpa es mía y yo tengo que pagar el castigo. Tu ve con Fati que también te necesita. 
-Bueno. Pero cualquier cosa nos llamas.-dijo Liam, luego se me acercó y me dio un toquecito cariñoso en el hombro- Y no te martirices hombre. Seguro que se despierta. Ya oíste al médico. 
- Sí, tranquilo. -dije intentando parecer calmado.
Cuando Selena salió de la habitación, salió llorando y muy nerviosa. Niall corrió rápidamente a abrazarla y a protegerla. Se le veía muy mal, y no me extraña.  Fueron pasando las chicas para abrazarla y supongo que darle ánimos como hacen todas. Cuando Simon salió de la habitación, estaba medio lloroso, eso dio a entender que el asunto era grave.  Se acercaron todos a mí y Simon empezó a hablar: 
-Entonces vas a pasar aquí la noche?- me preguntó con tono protector o algo parecido, no sabría describirlo. Yo sólo pude asentir con la cabeza.-Bien, pues sabes que cualquier cosa nos llamas y estaremos aquí lo antes posible. 
Yo: Ok. 
Entonces me despedí de ellos que ya se tendrían que ir a casa. A lo tonto se habían echo las 8.30 de la tarde.
Una vez que se fueron volví a la habitación y me senté a su lado, tomé su mano y empecé a hablarle y a contarle todo. Desde el sueño que había tenido una semana antes de conocerla y que desde ese sueño me robó el corazón, la mente, todo. 
A eso de las diez y algo me quedé dormido. Había sido un día largo y muy triste. 
"Estábamos todos juntos en la cabaña y pasándolo muy bien. Todos empezamos a beber un poco demasiado para celebrar que TMH fue un éxito mundial. Las chicas estaban tan contentas como nosotros y lo celebraron con nosotros pero sin pasarse con la bebida. Quién no bebió fue Andy, siempre tan correcta. Seguíamos bailando y bebiendo, cuando Andy se me acercó más de lo que ya estaba y me susurró al oído:
-Ven. Quiero enseñarte algo. 
Yo la seguí sin rechistar. Sé que soy un malpensado, pero su voz sonaba demasiado distinta, y el beber no me sienta muy allá. La seguí y me llevó hasta una puerta. La abrió, y de ella aparecieron como unas 40 chicas cabreadas qeu empezaron a golpearla  y se la llevaron al interior de aquella habitación, cerrando la puerta tras la última. Cuando yo entré, no había nada. Nada mas que un sobre con una carta escrita con tinta roja que decía qeu todo lo ocurrido era culpa mía. Eso me horrorizó. Intenté salir pero la puerta cada vez estaba más lejos de donde yo me encontraba y mis pies no avanzaban..." 
A la mañana siguiente me despertaron unas enfermeras que me pidieron que saliera de la habitación porque tenían que moverla y limpiar. Obedecí y salí. Di gracias a que me hubieran despertado. Ese sueño, bueno, pesadilla me estaba atormentando. Tras un par de minutos las enfermeras salieron y me permitieron volver a entrar. Esta vez, en vez de sentarme en el incómodo sillón, me tumbé a su lado. Necesitaba que sintiera que no estaba sola. Que estaba junto a ella pasara lo que pasara. No iba a permitir que este último sueño se hiciera realidad. Así que al tumbarme, la abracé fuerte y la atraje a mí. 
Como había dormido fatal, al poquito me quedé dormido. Me había dormido tan profundamente que me despertaron el médico y la enfermera a las dos horas para hacerle más pruebas a Andy. Me pidieron que esperara en la sala de espera y eso hice. 
Intenté contactar de nuevo con Harry pero seguía sin cobertura. Como aún era muy temprano, decidí no llamar a nadie más y descansar un poco en la sala. Me acomodé como pude en esas sillas de madera tan incómodas hasta que después de tres horas y media, una enfermera bastante simpática, dadas las circunstancias, me dijo que ya podía ir a la habitación. 
Con un poco de esfuerzo y con mucho cansancio, me levanté y fui a la habitación y me volví a sentar en el incómodo sillón. No me di cuenta, pero a lo tonto ya eran las 4 de la tarde, y tenía un poco de hambre y necesitaba ir a darme una ducha, así que llamé a Selena a ver si podía venir y estar con ella un rato. Accedió y al poco llegó junto con Vero. 
-Hola chicas.- conseguí decir mientras las saludaba a ambas con un abrazo.-gracias por quedaros con ella. 
-Tranquilo. Tú ve a descansar que tienes una carita de cansancio...-dijo Vero como si fuera mi madre- Alguna novedad? 
-No. Por la mañana le hicieron un par de pruebas, pero no me dijeron nada. 
-Okey. Tu vete tranquilo. Cualquier cosa te llamamos. - dijo Selena intentando tranquilizarme. 
-Gracias chicas. Os debo una. Adiós. -me despedí de ellas y me marché. 
Me fui a casa en taxi ya que el coche estaba en casa de las chicas. Al llegar me metí en la ducha y después de una media hora o así, salí y me fui a la cocina a preparar algo para comer. 
Le echaba mucho de menos. Y pensar que solo fueron un par de horas. Necesitaba dormir para esta noche, por si se despertaba estar junto a ella y que viera que no estaba sola. 
Al acabar el bocadillo, me fui a mi habitación a dormir un poco. A ver si estando en mi cama era capaz de dormir "bien". 
Cuando me desperté eran las 7.50 de la tarde. Ya eran horas de volver al hospital. Cogí mis cosas y emprendí el camino hasta el edificio de las chicas para coger mi coche e ir al hospital. Cuando llegué al hospital Vero y Selena estaban esperando en la sala de espera. 
-Hola chicas. - Dije acercándome a ellas- Qué pasa? 
-Más pruebas. Esto me preocupa- dijo Sele casi llorando. 
-Llevan como 2 horas ahí dentro con ella.- esto lo dijo Vero. 
-Y no os dijeron nada? -Ambas negaron con la cabeza.- Qué raro... Bueno si queréis podéis marchar a descansar. Si podéis, mañana avisar a Simon de que yo estaré aquí. 
-Claro- dijeron al unísono al mismo tiempo que se acercaban a abrazarme- supongo que lo entenderá. Después de clase vendremos a verla mientras tu vas para casa un rato, te parece?-preguntó Vero. 
-Como queráis. 
-Bueno, nos vamos que es tarde. Chao Louis. 
Me volvieron a abrazar y se fueron. De nuevo solo. Después de que se marcharan, los médicos tardaron como una media hora más en salir de la habitación. Realmente, me estaba asustando. Cuando salieron me atreví a preguntar: 
-Está todo en orden?- me dirigí al doctor que reconocía. 
-Más o menos. - esa expresión no me gusta nada.- Esta estable, pero no sabemos cuanto tardará en despertar, eso es lo que nos preocupa. También nos preocupa que puedan quedarle secuelas. 
-Si eso pasara, que se podría hacer?- pregunté para saber como reaccionar cuando despertara.- Y, cuales serían? 
-La más común es la amnesia. -dijo otro de los doctores.- Además, al haber sufrido un traumatismo de ese grado, lo más probable es que la sufra.- esa aclaración me heló la sangre. Tenía miedo de perderla. - Pero no se preocupe, seguro que no le pasará nada grave. -Eso me tranquilizó en parte. 
-Gracias por la información. -tras decir eso, los doctores se alejaron de la zona y yo me metí en la habitación. Me senté en el sillón y me dispuse a esperar a que pasara algo, pero nada.  Debido al cansancio, me volví aquedar dormido. 
(Narrador) 
Las cosas no pintaban muy bien para la joven muchacha. Ahora que había conseguido confiar en alguien, le pasaba esto. Lo que no saben es lo que pasará cuando despierte... 
Pasaron las semanas y Andy seguía sin despertar del coma. Sus amigos se estaban poniendo cada vez más nerviosos y el pobre Louis, cada día desesperaba más. 
Cada día, él le cantaba sus canciones favoritas y le hablaba, le contaba cosas de su día a día, de como sería su rutina si estuviera bien. Seguía pasando el tiempo, pero no pasaba nada. 
Todo seguía igual hasta que... 

martes, 1 de enero de 2013

Capítulo 34.

(Narra Josh)
Cuando fui a buscar a Vi para ir al cine y después a cenar, me quedé embobado. Estaba guapísima. Iba más o menos asi
-Wow! Estás hermosa.-dije mientras le cogía de la mano para que entrara más fácilmente en el coche. 
-Gracias.- Dijo sonrojándose. 
La llevé al cine pero al final no vimos ninguna película y emprendimos camino al centro. Al final dimos un paseo por el parque y después alquilamos una barquita para ir por el Támesis. Había sido una tarde perfecta. Lo bueno venía después...
(Narra Vi)
Esta tarde junto a Josh había sido inimaginable. Era super atento, cariñoso, adorable, tierno... Cualquier adjetivo positivo se le queda corto. Me encantó el momento en el que empezamos a dar vueltas por el Támesis ya que no nos poníamos de acuerdo a la hora de remar. Fue muy divertido.
Después de eso le invité a mi casa ya que sabía que no iba a haber nadie en 3 días y teníamos un poco de hambre. Le fui guiando por el camino y después de media hora o un poco más, llegamos a mi casa:


-Wow! Vives aquí?- Preguntó Josh como "flipando" un poco demasiado
-Sí- dije sin poder evitar reír- te gusta?
-Estas de broma!? Es preciosa.
-Quieres verla por dentro?- dije así un poco con segundas que no tardó en pillar a juzgar por como le cambió el gesto.  
Salimos del coche y entramos en la casa de la mano. Al abrir la puerta, parecía que se le iba a desencajar la mandíbula. No lo entendí. Era un recibidor normal y corriente: 


-Qué te pasa?- `regunté intentando aguantar la risa. 
-Que es una casa increíble. - Se me acercó, me agarró por la cintura y me atrajo hacia el. Me susurró al oído- Pero no más que su propietaria. 
Empezó a besarme el cuello y a acariciarme la espalda. Ese contacto me erizaba la piel. Después de besar mi cuello, besó mis labios de una forma tan dulce que era indescriptible. 
[Me abrazó así pero sin tener el mar de fondo]
 Antes de que nos pasáramos así el resto de la tarde, me separé de él y le pregunté: 
- Quieres comer algo? 
- Depende, vas a comer tu también algo?  
-Yo sí,- miré mi reloj- es mi hora de la merienda. 
-Entonces está bien. Con qué te ayudo? 
-Sentándote en el sofá del salón y esperando a que llegue.
-No. Te quiero ayudar. Dime que hago. 
-Ya te lo he dicho. Anda- le agarré de la mano y le llevé hasta el salón y le forcé a sentarse en el sofá. Una vez sentado le advertí- Como no te esperes aquí, te quedas sin postre. -intenté que pareciera el tono de una madre cabreada, pero solo hizo que me entrara la risa y él también se riera.  
Me dirigí a la cocina y en unos 10 minutos conseguí preparar la merienda. Me había quedado más o menos así: 
(Narra Josh) 
Cuando Vi me mandó sentarme en el sofá y me "regañó" de esa forma, juro que soy un mente sucia. No me conviene estar tanto con los chicos. El caso es que ya me estaba imaginando yo cosas muy raras, cuando de repente aparece con un gran plato con fruta y un cuenco con chocolate derretido en el que mojar los trocitos de fruta. 
He de reconocer que no soy de esa gente que le gusta la fruta, pero con chocolate estaba buenísima!
-Dios, esto está riquísimo!- exclamé antes de meterme otro trocito de fresa con chocolate. 
-Me alegra que te guste, pero no engullas que te ahogas!- exclamó divertida. -Si quieres luego preparo más. 
-No hace falta.- Cuando dije eso me intenté acercar un poco más a ella, ya que estábamos sentados uno frente al otro. Seguimos "merendando" en silencio, mirándonos y esperando, por lo menos por mi parte, para ver que hacía ella. Me quedé embobado mirándola y viendo cada una de las curvas que formaba su sonrisa. 
-Por qué me miras tanto?- comento con una risa nerviosa. 
-No,nada. No es nada. Es que me encatusas. -dije sonriendo. Al decirlo se sonrojó y sonrió tímida. 
Después de un par de minutos mirándonos directamente a los ojos sin decir palabra, nos fuimos acercando y nos besamos. Era demasiado dulce. No me podía creer que alguien como ella estuviera con alguien como yo. 
Me encantaba estar así con ella. Me sentía realmente bien, completo, a salvo, mejor persona..., y no lo entendía. Ella fue capaz de cambiar mi vida en muy poco tiempo. Por ello, la amaba...